“Stevie Wonder fue el primer cliente de la máquina de lectura Kurzweil (la primera máquina de lectura de texto impreso a voz) en 1976. Se hizo amigo del dueño y tuvieron muchas conversaciones sobre la tecnología aplicada tanto a las discapacidades como a la música. En 1982, mientras daba un recorrido por su nuevo estudio de música “Wonderland”, Stevie le preguntó si sería posible construir un puente entre los poderosos métodos de control de la música por computadora (en los que se podría usar una amplia variedad de dispositivos de entrada para controlar cualquier sonido disponible) con los hermosos sonidos de instrumentos acústicos como el piano y la guitarra. Y entonces, Kurzweil Music Systems nació en 1982 con Stevie Wonder como asesor musical.
Durante el siguiente cuarto de siglo desarrollaron una sucesión de teclados digitales que mantuvieron este liderazgo en realismo y al mismo tiempo proporcionaron una nueva y amplia paleta de sonidos y técnicas de modificación de sonido que solo son posibles en el mundo electrónico. Esta era la visión que Stevie Wonder había articulado en 1982. Muchos otros artistas de alto perfil (Paul McCartney, Billy Joel, The Who, Earth, Wind and Fire, Boston Pops, Andrew Lloyd Webber, por nombrar algunos) de todo el mundo parecían estar de acuerdo.
Kurzweil comenta que siempre he sentido que el tipo de tecnología que representa Kurzweil Music es altamente democratizador. Hace años, sólo los mejores estudios y laboratorios académicos podían permitirse una tecnología que permitiera dar forma flexible a nuevos sonidos. Ahora todas las personas, desde estudiantes de música hasta músicos de fin de semana, pueden acceder a estas herramientas. A medida que los avances tecnológicos sigan aumentando a un ritmo exponencial, KMS seguirá superando los límites de lo que es posible, borrando aún más la línea entre la música y la máquina.
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